Ahora que no hay que llevar mascarilla en exteriores, nuestra sonrisa vuelve a ser visible. Y muchas personas se han dado cuenta de que una bonita sonrisa es la mejor carta de presentación. Sin embargo, las manchas o el oscurecimiento pueden afectar gravemente a nuestra imagen. Por ello, el blanqueamiento dental es la mejor opción. En este artículo detallamos los tipos de blanqueamiento dental que hay y explicamos para quién está indicado cada uno.
Frecuentemente, muchas personas son reacias a someterse a este tratamiento, precisamente por el desconocimiento. Por ello, vamos a detallar toda la información acerca del procedimiento y sus ventajas de forma transparente.
Tipos de blanqueamiento dental:
1. Blanqueamiento dental en casa o ambulatorio
Como su propio nombre indica, este procedimiento se realiza en casa, pero es necesario pasar por una clínica antes de comenzar. ¿De qué manera se lleva a cabo? Vamos a verlo.
- Procedimiento para el blanqueamiento casero:
Se mide exhaustivamente la dentadura del paciente para fabricar una férula personalizada - Se facilitan las dos férulas y un gel con efecto blanqueador
- El paciente rellena las férulas con el gel blanqueador y se las coloca durante 6-8 horas al día (depende del caso)
Los resultados son visibles progresivamente, ya que es un método bastante suave. Sin embargo, la satisfacción es bastante amplia al finalizar las 2-4 semanas que dura el procedimiento. A su vez, está indicado para las personas que no pueden someterse a métodos más potentes. También para quienes requieren una forma cómoda y fácil de compatibilizar con su vida diaria.
2. Blanqueamiento dental en clínica
Es el método de estética dental más conocido. Solo se puede realizar en clínicas dentales, puesto que se emplea aparatología específica.
¿Cuál es el proceso?
- Antes de comenzar, se realiza un estudio para comprobar que la dentadura es idónea para el tratamiento
- Se aplica un gel blanqueador en la dentadura del paciente
- Se utiliza luz led para potenciar el efecto del gel
Todo el proceso suele durar alrededor de una hora, tras la cual los resultados son completamente visibles. La opinión general entre los pacientes es de total impresión, puesto que el cambio es bastante radical en un periodo tan corto de tiempo. Está recomendado especialmente para quienes tienen una dentadura fuerte y están terminando un procedimiento dental (ortodoncia, mayoritariamente).
Es importante destacar que el gel blanqueador que se utiliza en esta segunda opción no es el mismo que en la primera. La diferencia está en que el que nos ocupa es mucho más concentrado. Por tal motivo, solo puede aplicarse bajo la supervisión de un profesional y nunca se prescribe para uso doméstico.
3. Blanqueamiento mixto o combinado
Este tercer tipo es una combinación de los dos anteriores. Por tanto, reúne las ventajas del blanqueamiento casero y del que se realiza en clínica. Frecuentemente, se sigue este proceso.
Pasos para el blanqueamiento combinado:
- Se hace una medición completa de la dentadura del paciente para fabricar la férula
- Se proporcionan las dos férulas y el gel blanqueador
- El paciente rellena las férulas con el gel blanqueador y se las coloca durante varias horas
- Cuando han transcurrido unos 15 días (depende del caso), se realiza una sesión con luz led en la clínica
- Los 5-15 días restantes del tratamiento, se sigue realizando el procedimiento casero
Esta opción es bastante más potente que las dos anteriores, ya que combina la eficacia de ambas. Sin embargo, no es apta para todas las personas, solamente para aquellas que poseen dientes demasiado oscuros. Por ejemplo, puede ser una buena alternativa para quienes no han cuidado de su dentadura hasta ahora.
4. Blanqueamiento interno
De los cuatro tipos de blanqueamiento dental, este último es el más diferente. Si hasta ahora habíamos explicado varias formas de aclarar un diente partiendo de sus caras exteriores, ahora nos centraremos en cómo hacerlo desde dentro. Esta cuarta opción solo está indicada para quienes se han sometido a una endodoncia.
¿Cómo es el blanqueamiento interno?
- Se reabre la cavidad en la que se hizo la endodoncia y se desinfecta
- Se aplica un gel blanqueador en el conducto radicular (por dentro del diente)
- Se sella la cavidad para que se mantenga cerrada temporalmente
- Varios días después, se reabre la cavidad y se valoran los resultados
- Si se ha conseguido el efecto deseado, se reconstruye el diente. En caso contrario, se repite el procedimiento
Como hemos dicho, esta terapia se realiza cuando hay un diente oscurecido por una endodoncia. Esto es algo relativamente común, pero no hay por qué alarmarse. El blanqueamiento interno no es doloroso y resulta completamente seguro.
En definitiva, hay muchas formas de realizar un blanqueamiento dental y todas son eficaces. Lo importante es someterse a la más indicada para cada caso. Por eso, en la clínica ODOS Dental llevamos a cabo un estudio previo del paciente y valoramos cuál es la opción que mejor se adapta a cada necesidad. Así que si estás pensando en blanquear tus dientes, ¡contáctanos!