En este artículo explicaremos qué es la sonrisa gingival, sus posibles causas y las opciones de tratamiento disponibles hoy en día.
¿Qué es la sonrisa gingival?
La sonrisa gingival, también conocida como «sonrisa alta», se refiere a una condición en la que, al sonreír, se muestra una cantidad excesiva de encía superior en relación con los dientes. En una sonrisa ideal, la línea de las encías debería estar en armonía con la forma y longitud de los dientes, pero en casos de sonrisa gingival, las encías dominan la sonrisa.
Dicho esto, hay que saber que la sonrisa gingival no supone un problema para la salud bucodental, pero sí puede afectar a la autoestima de las personas, convirtiéndose entonces en un problema estético. De hecho, algunas personas, para disimular su sonrisa, pueden desarrollar hábitos como taparse la boca con frecuencia o realizar movimientos extraños con los labios al hablar. Por eso es importante conocer bien la causa de la sonrisa gingival en cada persona, para implementar el tratamiento adecuado a cada caso.

Causas
La sonrisa gingival puede deberse a varias razones. Algunas de las causas más comunes son:
- Exceso de tejido gingival (el situado en la zona de la encía):
En algunos casos, las encías pueden cubrir una porción significativa de los dientes debido al exceso de tejido gingival. - Hipermovilidad del labio superior:
Algunas personas, al sonreír, elevan más de lo habitual el labio superior, lo que resulta en una mayor exposición de las encías. - Erupción (aparición) incorrecta de los dientes:
La erupción de los dientes es un proceso largo que dura hasta la adolescencia. Algunas variaciones naturales durante el proceso pueden resultar en dientes más cortos de lo normal y en una sonrisa más gingival. - Mala alineación dental (maloclusión):
Puede provocar un desgaste excesivo de los dientes, mostrándose más cortos. Y así, al sonreír, se verá una mayor cantidad de encía. - Hueso maxilar desproporcionado:
Cuando el hueso maxilar es demasiado largo, el labio queda elevado y las encías más expuestas, dando lugar a una sonrisa gingival de origen óseo.
- Exceso de tejido gingival (el situado en la zona de la encía):
Tratamientos
Estas son algunas de las opciones más comunes de tratamiento, dependiendo de la causa del exceso de encía:
1. Cirugía:
El procedimiento quirúrgico que trata la sonrisa gingival se denomina Gingivectomía y es el tratamiento recomendado para los casos de exceso de tejido gingival. Es una cirugía mínimamente invasiva, que se realiza con anestesia local. Consiste en recortar y eliminar el exceso de tejido gingival, lo que permite que se exponga más parte de los dientes y desaparezca la sonrisa gingival.


2. Ácido hialurónico o bótox:
Es el tratamiento recomendado para los casos de hiperactividad del labio superior. La inyección de alguna de estas sustancias en el músculo elevador del labio superior puede reducir su actividad y, por lo tanto, la exposición de las encías. Su resultado es, en general, bastante natural y satisfactorio.
3. Ortodoncia y carillas dentales:
Se recomiendan cuando la sonrisa gingival está producida por una mala alineación dental. Para que no se vuelva a producir el desgaste dental, primero se corrige la maloclusión con un tratamiento de ortodoncia. Una vez que estén alineados los dientes, se colocan carillas en los dientes desgastados, para hacer desaparecer o reducir todo lo posible la sonrisa gingival. Las carillas también se recomiendan en los casos en que los dientes no hayan aparecido de forma correcta y sean más cortos de lo normal.
4. Cirugía maxilofacial:
Para casos más severos, en los que el crecimiento del hueso maxilar es excesivo y provoca que haya más encía que diente, se recomienda realizar una intervención quirúrgica denominada Cirugía Ortognática, en la que el maxilar se coloca a la altura correcta en relación al labio. Este tipo de cirugía es más compleja y la lleva a cabo un cirujano maxilofacial en un entorno hospitalario.
Conclusión
Aunque no sea un problema de salud bucodental, la sonrisa gingival puede afectar la confianza y calidad de vida de las personas que la padecen. Existen varios tratamientos eficaces para tratar cada caso y lograr una sonrisa más armoniosa, adaptada al bienestar emocional de cada persona. Por eso, es fundamental realizar un correcto diagnóstico para resolver el problema.
